Editora: Ángela Esquivel Jiménez
‘Telescopio’ será el próximo álbum de Elena y La Orquesta Lunar, cargado con fusiones entre música del mundo, afrobeat, rock, entre otras músicas que se acompañan de poesía y sonidos que nos remiten a la conexión de la humanidad con la naturaleza.
De momento no hay una fecha de estreno, pero sí tenemos una pincelada de lo que será el álbum con el sencillo ‘Afortunada’ y con el corto documental disponible en su canal de YouTube, donde se muestra lo que ha sido el proceso de composición y producción de este nuevo proyecto.
Las canciones que conformarán esta nueva propuesta han pasado por diferentes transformaciones que responden a los cambios que, de acuerdo con Elena, ha venido sintiendo en su vida desde hace más de dos años.
Componer sin apego
En los procesos de composición de Elena, las canciones llegan de diferentes maneras. Algunas veces no logra identificar de dónde están llegando las ideas o las frases que aparecen en su mente, sin embargo las escribe o las graba.
En el transcurso de sus procesos de composición no todas las canciones se quedan, algunas se desechan del todo y otras se van transformando en el camino, pues lo que busca con ellas es que representen algo real, sincero y que le hagan sentir cuando canta esas canciones.
“Yo canto lo que creo porque sino es como estar mintiendo”.
Para conseguir está sinceridad en su música, Elena procura mantenerse conectada con sus voces internas a través del silencio y tiene temporadas donde se dedica solamente a componer y escribir.
Es por esto que las mañanas son un momento muy importante en el día a día de Elena, donde aprovecha para ordenar su cabeza con calma y quedarse sentada en el sillón escribiendo o improvisando algo con sus instrumentos.
Los primeros acordes
Tenía aproximadamente 5 años cuando sus padres le regalaron un pequeño teclado con el que Elena comenzó a explorar el mundo de la música. Más adelante, su mamá hizo una canción para un festival de su escuela y esa fue la primera vez que Elena se presentó en un escenario ante un público.
A sus 9 años hizo la prueba para entrar al Instituto Nacional de la Música y, a pesar de que no sabía cuál instrumento iba a tocar, fue en ese momento cuando ya sintió que iba a comenzar una carrera musical.
“En ese momento, no sabía ni qué instrumento iba a tocar, no sabía ni cómo era el lugar, no sabía nada, pero yo sabía que era algo grande”.
