El RTI busca registrar a las personas indígenas, así como hacer mediciones topográficas de los territorios, para luego efectuar los desalojos o indemnizaciones sobre las personas no indígenas que ocupan dicho lugar
Tras su inicio en el 2016, el Plan Nacional de Recuperación de Tierras Indígenas (RTI) a cargo del INDER peligra en su continuidad, dadas las críticas al mismo y desconocimiento de la posición del nuevo Gobierno.
«Actualmente, no se cuenta con ningún otro mecanismo para la devolución de estas tierras, la recuperación de territorios indígenas depende enteramente de la voluntad política del gobierno vigente», afirmó el investigador del CICDE Juan Antonio Gutiérrez.
El inicio de este mecanismo fue impuesto por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos Corte de la OEA, a consecuencia de la escalada de conflictos violentos a grupos indígenas que intentaban reclamar sus tierras. Esto sucede a pesar de estar respaldados por la ley nacional (1977) e internacionales (1980), señaló Gutiérrez. Por ejemplo, aún están en espera los juicios de asesinato contra Jehry Rivera o Sergio Rojas, que dejan en duelo a todo un grupo de indígenas producto de estos conflictos de territorio
(AUDIO: Investigador del CICDE Juan Antonio Gutiérrez.)
El RTI busca registrar a las personas indígenas, así como hacer mediciones topográficas de los territorios, para luego efectuar los desalojos o indemnizaciones sobre las personas no indígenas que ocupan dicho lugar. Gutiérrez explica que el derecho a indemnización por parte del Estado sólo corresponde a las personas no indígenas, que presenten un título de propiedad sobre territorio indígena previo a 1977.
Existe mucho interés por estas tierras a causa de la ausencia total de impuesto a la renta. Esto generó la necesidad de filtros para determinar si una persona es indígena de manera verídica, tales como consultar a estructuras clánicas o hacer esfuerzos en buscar en bases de datos, no basta con autoproclamarse indígena.
“Hay una recuperación en Térraba que ahora viven más de 100 personas Brörán, que antes estaban unos hermanos que era de 1000 hectáreas y tenía 1000 cabezas de ganado que les sacaban un usufructo” – Investigador del CICDE Juan Antonio Gutiérrez.
El RTI no queda exento de críticas, se le han hecho observaciones sobre su falta de transparencia en el proceso de clasificación indígena o no indígena, escasa comunicación sobre las fincas devueltas y poca explicación de los datos a cualquier persona en general y mucho menos a personas nativas, expuso la investigadora del CICDE Xinia Zúñiga
«Conversando con gente de los territorios nos decían: “No es cierto, nosotros hemos pedido información y no nos las han dado, hasta el momento la estamos esperando” “- Investigadora del CICDE Xinia Zúñiga.
Adicionalmente, el RTI es solo un programa de registro, no asegura la devolución de tierras en sí mismo, sino que depende de la voluntad política para efectuar los desalojos con la Fuerza Pública o de pagar las indemnizaciones; aunque estos últimos serían una minoría de casos. El proceso del RTI podría verse beneficiado por una coordinación de otras instituciones del Estado aparte del INDER, sin embargo, esto tampoco ha sido una prioridad en el Gobierno, comentó Gutiérrez.
En la actualidad no se conoce la posición del Presidente Rodrigo Chaves respecto a este tema, ni su opinión acerca del programa RTI. Puede conocer más al respecto del tema en el programa “Hoy con la UNED” de Radio Universidad.