La jornada ampliada no contempla el tiempo de cuido de menores y adultos mayores, desaparecería la opción de realizar horas extra y podría afectar la salud mental de las personas por sobrecarga de trabajo diaria
La Asamblea Legislativa discute el Proyecto de Ley que permitiría la jornada laboral 4×3, que propone una jornada ampliada de 12 horas diarias por un máximo de 4 días semanales, con 3 días libres seguidos. Según el proyecto, las horas se pagarían como ordinarias y no se permitiría que la persona trabaje horas extra sobrepasando las 12 horas diarias, sino únicamente en días libres, que serían acordados entre el patrono y el empleado.
Diversos sectores se han posicionado a favor de la aprobación de esta propuesta, como la UCCAEP y la Cámara de Exportadores de Costa Rica (CADEXCO), quien asegura que la reforma mejoraría la productividad y economía del país. Sin embargo, actualmente el proyecto no cuenta con evidencia que respalde dicha afirmación.
Por su parte, otros sectores se oponen rotundamente al proyecto, justamente por la inexistencia de estudios que demuestren un beneficio en cuanto a productividad, economía y generación de empleos.
Radio Universidad conversó con la economista y diputada del Frente Amplio (FA), Sofía Guillén Pérez, quien comenta que desde la fracción del FA consideran que no es una propuesta de reactivación económica y que, por el contrario, afectaría enormemente al los y las trabajadoras.
“[…] va a implicar un desmejoramiento en las condiciones laborales de muchas personas, ¿por qué? Porque, aunque algunos digan que es voluntario, en la práctica el poder de negociación está concentrado en los patronos”, asegura Guillén, y agrega que
“Especialmente en tiempos de crisis, el trabajador tiene muy poco margen para negociar sus condiciones, entonces sin una inspección laboral fuerte ¿quién va a velar para que, al final del día, no sea una imposición de un patrono hacia un empleado desesperado en condición de necesidad?”
Repercusiones para personas trabajadoras
A pesar de que la persona trabajadora contaría con 3 días seguidos de descanso, a nivel general se prevé que las afectaciones superarían significativamente las hipotéticas ventajas que el proyecto pueda ofrecer. Algunas de estas afectaciones serían:
- La jornada ampliada no contempla el tiempo de cuido de menores y adultos mayores, asumido principalmente por mujeres, quienes se verían excluidas de las opciones laborales por falta de tiempo para cumplir con ambos trabajos.
- Desaparecería la opción de realizar horas extra después de la jornada normal de trabajo, lo cual actualmente representa un ingreso adicional para las familias que lo necesitan.
- Es muy probable que los 3 días de descanso se destinen a otro trabajo, favoreciendo la precarización e informalidad laboral.
- Afectación a la salud, tanto física como mental, porque el aumento en horas laborales también aumenta el cansancio y disminuye el tiempo en familia, el tiempo para la recreación, para alimentarse adecuadamente y para realizar ejercicio. Esto también puede afectar la productividad.
- Además, la reforma puede convertirse en un desincentivo en cuanto a la contratación de mujeres, de personas que realizan labores de cuido, de estudiantes que trabajan y estudian a la vez, de personas con alguna discapacidad o enfermedad que no puedan asumir esta jornada y el patrono prefiera no contratarles, lo que aumenta la exclusión y la desigualdad en cuanto al acceso a oportunidades laborales.
Por su parte, en una entrevista realizada por el periódico La República, el pasado 15 de junio, a la diputada oficialista Pilar Cisneros, ella asegura que la jornada ampliada no incluye a las mujeres solteras sin red de apoyo y que, en todo caso, ellas pueden mantener su horario de 8 horas.
En caso de que el proyecto se apruebe, va a ser necesario observar si en la práctica esta opción será real o si, por el contrario, representará lo antes comentado: un factor de exclusión a la hora de contratar a estas mujeres jefas de hogar.
En esta entrevista, al consultarle a Cisneros -quien apoya firmemente el proyecto- sobre la repercusión que la reforma puede tener en la salud, ella contestó que “yo he trabajado toda mi vida 14, 16 o más horas y estoy viva”.
Ante la pregunta de ¿Cuál sería un beneficio para las personas trabajadoras?, Sofía Guillén considera que no hay ninguno. “Creemos es que este es un proyecto ideado para ahorrarse el pago de horas extra, entonces obviamente los sectores trabajadores no ganan. Ganan algunos patronos que quizás hoy en día ya están jugando sucio o quisieran hacerlo y que actualmente la ley no se los permite.”, concluye con preocupación la diputada frenteamplista.