Leiner Vargas Alfaro es docente y doctor en Economía, además de catedrático del Centro Internacional en Política Económica (CINPE) de la Universidad Nacional. También fue vicerrector de administración en la UNA. Vargas se presenta como candidato a rectoría universitaria por tercera ocasión y en este caso bajo la tendencia “Cambio 2020”, junto a la máster en administración de empresas, Inés Revuelta como candidata a la rectoría adjunta.
¿Cuáles considera que son los retos que la Universidad Nacional?
Nosotros tenemos una orientación por la misión fundacional de principios de los años 70’s, que efectivamente está marcada por esa orientación hacia las regiones, hacia los sectores de la población costarricense más excluidos de las capacidades para progresar. Somos esencialmente lo que se conoce como la universidad necesaria, pero esa universidad necesaria de alguna manera ha transitado por una sociedad y una institucionalidad que la han vuelto en la forma una institución muy compleja, una institución donde hemos burocratizado muchísimo su quehacer, donde sobre todo la última década, enfatiza mucho en el procedimiento, en el trámite, en la burocracia interna de la institución y de alguna forma hemos olvidado poner ese énfasis en los resultados y en el impacto. Esa situación nos tiene con una pérdida de conexión con los actores de la sociedad costarricense, entonces la comunicación de la Universidad se ha visto dificultada, y entonces se ha perdido ese compromiso de Estado.
Escuche: “La Universidad ha perdido el compromiso de Estado”.
¿Qué cambios propone impulsar en caso de ganar la elección?
En esa universidad que necesitamos, creemos que es fundamental cambiar nuestro modelo de planificación y de gestión, esto significa volcarnos hacia tener más resultados e impacto y dejar de poner tanto énfasis en el procedimiento, en el trámite, en el reglamento. Para eso hemos diseñado tres principios, que están en nuestra propuesta de trabajo, y la hemos llamado los principios del modelo SIF.
“Simplificación, innovación y flexibilización; ¿En qué consiste el principio SIF?”
¿Considera que la UNA debe fortalecer áreas de formación o incluso abrir nuevas carreras?
La universidad tiene que reinventarse en la docencia. La docencia es una actividad esencial del quehacer universitario, pero no es la única. La universidad que solo da docencia es un colegio grande. Entonces es algunas veces es imposible concebir, digamos, ciencias exactas y naturales, filosofía, literatura y humanidades. Es imposible concebir una facultad de salud, por ejemplo, fortalecida, sin tener una facultad de artes donde pueda fluir la música, el teatro, la danza y, en general, el arte. Este tema de orientar la universidad con exclusivo interés tecnológico o técnico es una concepción, digamos, ya superada por los países Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y es una concepción que me parece que va en relación a las competencias de los profesionales del siglo XXI. Las competencias de los futuros costarricenses que van a participar de la educación superior requiere, digamos, una formación muchísimo más amplia.
“Nuestro énfasis va a ser reinventar la forma de lo que hacemos”, plantea Leiner Vargas, candidato a rector de la UNA.
EDUCACIÓN DURANTE Y DESPUÉS DE LA PANDEMIA
La exclusión de los estudiantes, en esta coyuntura de la pandemia, podría tener un efecto negativo a largo plazo para todo el país ¿Cómo las universidades debería enfrentar este problema?
La presencialidad remota que se ha declarado de la docencia universitaria y algunas de las otras actividades sustantivas, es una estrategia de emergencia ante la emergencia. Ahora no estábamos preparados, por lo menos no de forma completa, para afrontar esa circunstancia. Efectivamente, tanto del lado de los docentes, de los investigadores, del personal administrativo de la universidad, hemos hecho grandes esfuerzos para ir encontrando los espacios de solución a las distintas disyuntivas que se han presentado.
Los retos para una verdadera inclusión digital por Leiner Vargas: “Creemos que hay una enorme responsabilidad de las autoridades del Fonatel”
¿Cuáles acciones concretas a corto plazo se podrían implementar para revertir esa exclusión universitaria provocada por el nuevo coronavirus?
Hay que ser flexible y eso es uno de nuestros principios de gestión. Hay que entender que no todos somos igualiticos, como decimos popularmente. Somos una sociedad que ha tenido una ampliación sustancial de la desigualdad económica y social, y eso hace que las condiciones de los estudiantes, por ejemplo que nosotros antes teníamos en residencias estudiantiles o que vivían en las ciudades cercanas a los campus que tenemos, ahora se devolvieron a zonas indígenas o zonas rurales, donde lamentablemente nuestro rezago en materia de telecomunicaciones, aún no resuelve la condición de conectividad. Entonces eso no es justo para estas personas, porque obviamente el compromiso sigue siendo la calidad.
Los profesores, tienen que considerar esa nueva condicionalidad que tienen las personas, estudiantes y esto creo que es un desafío país.
Es probable que la transformación del modelo universitario esté marcada por la disminución de los fondos que el Estado aporta como inversión en educación superior. ¿Cómo ser más eficiente con menos recursos?
Tenemos una serie de leyes que han interferido en el quehacer de la institución y la han vuelto totalmente burocrática, de eso tenemos que hablar en los próximos meses y años, para soltar esas amarras de la institucionalidad universitaria, en el marco de nuestra autonomía. También vamos a poner una defensa muy clara de la universidad como derecho de servicio con énfasis en lo público del valor de la universidad.
“No es negociable para las Universidades una reducción del FEES”, pero la Universidad tiene que comprometerse con indicadores de gestión y con rendición de cuentas para seguir siendo un pilar en el quehacer del Estado.
SOSTENIBILIDAD FINANCIERA UNIVERSITARIA
¿Cuál es el análisis del informe de la Comisión Legislativa que investigó el uso del FEES en la Asamblea Legislativa?
La necesidad de darle sostenibilidad financiera a la universidad y a su trabajo pasa por una transformación a lo interno, por una nueva negociación, que no necesariamente tiene que ser una negociación colectiva, sino que tiene que ser un nuevo pacto laboral que garantice condiciones de trabajo dignas, que garantice nuevas oportunidades para los académicos y administrativos de la universidad. Pero esa no es una discusión en la que compete meter a las autoridades políticas. Eso es una discusión que se va a tener que realizar en el marco de nuestra autonomía pero por supuesto ligado a el Plan Nacional de Desarrollo.
¿Mantendrá el apoyo a la acción de inconstitucionalidad presentada por las universidades en contra de la regla fiscal?
Nosotros creemos que la universidad tiene que dejar de involucrarse en la politiquería de corto plazo y esto pasa por reencontrar esos lazos que nos comunica con los actores claves del desarrollo del país, el Gobierno y la Asamblea Legislativa, con una visión distinta, es decir, con una visión de cómo comprender nuestro rol en la sociedad costarricense como este espacio que creamos puentes. Vamos a sentarnos con todos, a convencerlos del valor público de la universidad. Yo estoy estoy convencido de que vendrán mejores tiempos en esa relación, digamos política con pe grande, de la universidad con el Estado costarricense.
DERECHOS HUMANOS
¿Cuál debe ser el papel de las universidades públicas con respecto al cumplimiento de Derechos Humanos para todas personas que componen la comunidad estudiantil?
La universidad es un caleidoscopio, es diversidad. Mal hace una rectoría si pretende ocultar esa diversidad que hay en la sociedad costarricense. Nosotros permitimos que se exprese en nuestra institución, las diferencias de criterio o las diferencias ideológicas, en un marco de absoluto respeto a los y las posiciones que hay en ese caleidoscopio de pensar, de saber y de actuar. El tema de derechos humanos, en general, no es negociable dentro de la del comportamiento de la universidad como institución. Nosotros somos obviamente una institución que garantizamos el ejercicio de esa libertad de criterio, pero por supuesto, dentro del marco del absoluto respeto a los derechos humanos. Hoy somos una sociedad muy diversa, muy compleja en todas sus expresiones y eso nos enriquece más que nos perjudica.
En su propuesta de trabajo se compromete a impulsar el trabajo de la Fiscalía para la atención de hostigamiento sexual ¿Como será ese apoyo?
La situación de acoso laboral tiene que resolverse propiciando un clima de autoconfianza, un clima donde haya flexibilidad, donde haya simplificación del quehacer y obviamente, un estilo de gestión donde se toma en cuenta el resultado y el impacto que el procedimiento y el trámite, donde se juzgue el trabajo por el resultado y no por haber cumplido todos los trámites y esto va a reducir sustantivamente el estrés en el clima organizacional y va a reducir este tipo de actitud. Pero con aquellos que asuman esta actitud y que tenga una condición probada no hay otra cosa más que obviamente establecer lo que recomienda el procedimiento.
En el 2018 nació el movimiento Me Pasó en la UNA, el cual denuncia la violencia sexual y machista que sufren principalmente las estudiante de la institución ¿Cómo se abordará esta problemática?
Ese tema es de cero tolerancia, lo que significa que no vamos a permitir el acoso sexual de ningún nivel y vamos a ser absolutamente firmes en este tema. Tenemos un reglamento y tenemos una fiscalía, un mecanismo y un procedimiento para atender estas denuncias. Vamos a hacer efectivo este proceso. Si hay que discutir mejoras asociadas con la prevención del tema, si hay que discutir mejoras asociadas con cambios en el reglamento que requieran, digamos apoyar por ejemplo al proceso, vamos a propiciar la discusión en el seno del Consejo Universitario y vamos a tomar esa decisión de oficio, que es importante y es además relevante. Hay que entender que esta es una temática de interés institucional que ya está dentro de la normativa.
¿Ha estado a favor y promovido los derechos para personas del mismo sexo, como la más reciente aprobación del matrimonio igualitario?
El proceso de incorporación de este tema dentro de nuestra formación deberá ser un tema fundamental. Pero esos son temas que deben estar en el pénsum del sistema de educación en general, porque nuestros muchachos ya llegan, digamos, con una percepción de ese tema a la universidad y eso se forma en la secundaria y en la primaria. En ese ámbito, debemos aprender a convivir en diversidad. En ese sentido encontrarán una rectoría comprometida a favorecer el encuentro más que el desencuentro.
¿Cuál es su posición sobre el aborto, tanto como forma terapéutica como la posibilidad de que sea libre elección de la mujer?
En relación a los Derechos Humanos es tan importante el derecho de elección de la madre como el derecho a la vida del niño y le puedo decir que yo creo en la vida desde que es fecundado el óvulo y, en ese contexto, el derecho a la vida del niño es también y debe ser tomado en cuenta. Los derechos humanos de una persona no pueden sobreponerse a los derechos humanos de otra persona, y en ese aspecto yo les quiero decir que me parece parece injusto porque no hay una relación de igualdad a la hora de la decisión y me parece que mantener esto en estas circunstancias (norma técnica para aborto impune) es lo correcto. Me parece que yo respeto ampliamente si una persona mujer decide, digamos, no traer al mundo una criatura, pero no puedo en lo personal compartir.
Yo tengo la posibilidad de decir que tengo tres hermosas criaturas: una hija que tiene ya 16 años y que adoptamos con mi primer pareja, y dos hermosos retoños, una niña de seis años y un niño de un año y siete meses, de mi segunda relación, con la que actual convivo, y la verdad, yo prefiero decirle que vivo feliz, que soy una persona que adoro a mi hija mayor porque es de alguna manera el resultado de lo que lo que esa madre en determinado momento decidió que es, darle vida a ese ser.
“La Universidad no tendrá ninguna actitud negativa con aquellas madres qué por alguna razón tengan que optar por esta condición”, pero no nos comprometemos a impulsar o detener este tipo de decisiones.
Don Leiner una publicación en su Facebook ¿usted plantea que el aborto es un retroceso?
Una cosa es la posición personal y otra cosa es el criterio institucional. En el tema institucional, la universidad no puede oponerse a un debate nacional sobre este tema, pero tenemos que entender que hay diversidad de posiciones y diversidad de opiniones, que esto no se trata de que yo tengo la verdad o que fulanito o zutanito quiere la verdad. Estas cosas tienen que discutirse en un marco de respeto, de comprensión a las mujeres, por supuesto, hay circunstancias muy particulares o muy específicas. Yo creo que como sociedad nos merecemos ese respeto, a tener esa discusión, sin generar grandes conflictos por temas que tienen que discutirse con tranquilidad y esa es mi posición, discusión con tranquilidad, sin generar, digamos, heridas en la sociedad costarricense, porque la sociedad costarricense quiere mucho más de lo que nos une.
MILITANCIA POLÍTICA
¿Milita actualmente o ha militado en el pasado en algún partido político?
Yo soy de ideología socialdemócrata y eso lo he dicho públicamente, dentro y fuera de la universidad. Yo he tenido una enorme participación política en la sociedad costarricense, desde las asociaciones de desarrollo en las que he participado, en las cooperativas en donde he sido dirigente, en las asociaciones solidarias, en los sindicatos, en los cuales participo y formo parte de discusiones, digamos, como parte de el movimiento sindical y por supuesto, en agrupaciones como la Fundación Friedrich Ebert del Partido Socialdemócrata Alemán, en donde participé en la formación de los líderes jóvenes de este país que provienen de los de los movimientos progresistas de Liberación Nacional, del Partido Acción Ciudadana, del Frente Amplio.
“Usted no va a encontrar nunca una participación, una contribución y una militancia a un partido político”.
Vargas añade: “Creo que en algunos de mis adversarios hay un poquito de angustia”.
Don Leiner en la campaña de 2014 usted fue coordinador del equipo económico de Johnny Araya por el Partido Liberación Nacional y en 2017, usted llamó, en sus redes sociales, a votar en la asamblea partidaria del PLN para la elección del candidato previo a la campaña de 2018.
Bueno, cuando yo defiendo mis ideas, yo no tengo ningún reparo en decir vote por equis candidato. Usted también va a escuchar en determinado momento apoyos al señor Villalta, para muestra, un botón de participación en favor de la propuesta política que hicimos con el actual alcalde de San José cuando era candidato y por supuesto, le digo que es un total derecho de un ciudadano tomar la decisión y decirlo, eso no es militancia política,eso es una decisión que en una democracia corresponde a cualquier ciudadano. Esa falsa concepción de que las personas tienen que estar ocultando su criterio sobre lo que opina respecto a uno u otro tema, más bien da miedo de algunos de mis adversarios en esta campaña política. ¿O es que acaso es un pecado?
“Lo que existe es un prejuicio, vamos a buscarle un pelo en la sopa este señor”, concluye Vargas.