En resumen: Es incorrecto afirmar que exista una sobrepoblación de cocodrilos en Costa Rica, como lo aseguró el canciller, Arnoldo André Tinoco. Ningún estudio respalda tal afirmación, a pesar de que sí hay más cocodrilos que en el pasado.
El canciller también sugirió incorrectamente en una entrevista al diario La Nación que no hay forma de atender un eventual problema de sobrepoblación de animales silvestres. En realidad, la normativa de conservación en Costa Rica permite la cacería de control poblacional si dichas intervenciones están justificadas científicamente. Esa medida ya se ha aplicado anteriormente en el Área de Conservación Arenal Tempisque en el 2012 y en el 2016.
El avistamiento de esos animales ha aumentado porque sus poblaciones están recuperándose y, además, los asentamientos humanos se han extendido en zonas idóneas para los cocodrilos. Sin embargo, eso no puede confundirse con sobrepoblación. Así lo explicó a Doble Check el biólogo e investigador de cocodrilos, Iván Sandoval.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, el canciller dijo que hay sobrepoblación de cocodrilos con base en “percepción pública”. El Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) no respondió las consultas de Doble Check oportunamente.
¿Qué dijo el canciller?
El diario La Nación publicó una entrevista al canciller y ministro de Relaciones Exteriores, Arnoldo André Tinoco, el 5 de junio. El periódico publicó la entrevista con este título: “Canciller Arnoldo André cuestiona prohibición de cacería de animales silvestres”.
“Costa Rica prohibió la cacería de todas las especies silvestres. Creo que es el único país del mundo donde está absolutamente prohibido cazar animales silvestres. Eso ha provocado una sobrepoblación, por ejemplo, de cocodrilos en los ríos, inmanejable a este punto”, dijo el canciller según La Nación.
Según ese periódico, “André mencionó que, en naciones de Europa o América del Norte, se asignan a los cazadores cuotas específicas de machos y hembras de determinadas especies, que pueden ser cazadas en distintas temporadas del año con el fin de regular las poblaciones”.
El ministro trató de expresar una analogía de por qué las prohibiciones absolutas son inconvenientes, como un argumento en contra de prohibir la exploración y explotación de gas y petróleo en Costa Rica.
Ante consultas de Doble Check, la Cancillería afirmó que el jerarca usó el comentario sobre los cocodrilos como un ejemplo basado en la “percepción pública” para ilustrar un punto, y no como una afirmación científica. “No pretendía más que ilustrar una situación con base en un ejemplo al azar, sin que constituya ningún interés en apoyar la cacería”, agregó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Leyes de caza
El canciller señaló que hay sobrepoblación de animales silvestres en Costa Rica porque la cacería está “absolutamente prohibida”. Eso es falso.
Costa Rica prohibió la cacería deportiva en 2012, siendo pionera en América en ese tipo de legislación. Aún así, la Ley de Conservación de la Vida Silvestre a ley permite la caza de subsistencia y la caza de control bajo condiciones reguladas y apegadas a estudios científicos.
Colombia aprobó una ley similar después de que la Corte Constitucional de ese país determinara que la cacería recreativa es “incompatible con la obligación o el mandato constitucional de la protección del ambiente”.
No hay sobrepoblación de cocodrilos
No hay estudios científicos publicados que respalden que haya una sobrepoblación de cocodrilos en Costa Rica. El biólogo de la Universidad Nacional (UNA) y especialista en estos animales, Iván Sandoval, explicó que la población de cocodrilos se está recuperando en el país y es saludable en algunas áreas.
Ninguna de las poblaciones identificadas en el país muestra signos de sobrepoblación, como competencia extrema por recursos o “mala condición física” generalizada de los individuos, destacó el experto a Doble Check.
Sandoval presentó un estudio que desarrolló junto con Mauricio Méndez, del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), en el que analizaron las poblaciones de cocodrilos americanos y su distribución en Costa Rica. La investigación reveló que los ríos de la vertiente del Pacífico tienen la mayor cantidad de cocodrilos por kilómetro. La densidad más alta de estos reptiles se encuentra en el Gran Humedal Tempisque, así como una mayor proporción de adultos, que representan aproximadamente una cuarta parte del total de individuos.
En 2012 y en 2016, el SINAC hizo planes de manejo para reducir el número de cocodrilos machos en los ríos Arenal y Tempisque. Sandoval explicó que, cuando existe una sobrepoblación de machos en la época reproductiva, los machos dominantes desplazan a otros individuos que terminan poblando zonas en donde no suelen estar. Las autoridades reubicaron 85 animales en el 2012, y medios de comunicación reportaron la extracción de 40 cocodrilos en el 2016.
“Algunos de estos animales fueron donados a centros de rescate, y los que estaban en mala condición física o que tenían algún problema fueron sacrificados”, relató Sandoval.
Sí hay más cocodrilos en el país
La percepción de que hay más cocodrilos en algunos ríos de Costa Rica es correcta, sin que esto signifique que exista sobrepoblación.
Por ejemplo, la población de cocodrilos adultos en el río Tempisque pasó de menos de un individuo por kilómetro en 1998 a casi cinco en el 2012, según las estimaciones que el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) facilitó a Doble Check.
Sandoval explicó que dos fenómenos confluyeron a partir de la década de 1990 para que haya más avistamientos de cocodrilos. En primer lugar, se abandonaron prácticas de caza de cocodrilos y, paralelamente, las personas empezaron a poblar sitios donde hay condiciones ideales para que vivan cocodrilos, incluso en sitios que eran recónditos anteriormente.
Sandoval relató que algunas personas le han dicho que no veían cocodrilos en ciertas zonas del país hace 30 años, y él les suele responder que eso es correcto. “Hace 30 años, no había cocodrilos porque sus papás, sus abuelos o la gente que vivía aquí los había cazado, entonces no se veían. Pero esa es una zona que está a cierta altura, con cierto tipo de cobertura vegetal, que tiene buena proporción de agua y que está en el rango geográfico de distribución de ellos”, explicó el biólogo.
En 2022, Sandoval y otros colegas publicaron un estudio que muestra las áreas de confluencia entre los hábitats potenciales de los cocodrilos y las áreas de interacción con personas. “Hay condiciones ideales para que haya cocodrilos en ambas vertientes del país, zonas donde es un ‘hotel de cinco estrellas’ para cocodrilos, y esas mismas zonas son un ‘hotel cinco estrellas’ para actividades humanas”, recalcó el investigador.
Según Sandoval, la percepción de que hay sobrepoblación de cocodrilos también puede estar influenciada por la omnipresencia de teléfonos móviles y el uso de redes sociales. “La gente comienza a ver que hay muchos, pero en realidad es la misma foto del mismo cocodrilo”, advirtió.
Nota del editor: La versión original de este chequeo, publicada el 28 de junio, fue actualizada con información adicional sobre la densidad poblacional y distribución de los cocodrilos en el país, compartida por el Ministerio de Ambiente y Energía el 5 de julio.