La Isla del Coco es un lugar importante a nivel mundial como reservorio de biodiversidad, endemismo y ahora como santuario. Es un sitio valioso para la economía a través del turismo; un sitio de belleza paisajística excepcional y es considerado uno de los diez mejores lugares para buceo recreativo en el mundo por la UNESCO.
En la Isla del Coco nadie debería lastimar a los tiburones. Tal vez se pregunte ¿por qué?
En el mes de abril este parque nacional fue declarado como “Santuario Natural de Tiburones”. Esto como estrategia política, social y económica para preservar esta especie, perseguida por el aleteo y pesca tanto legal como ilegal.
Mediante este decreto ejecutivo se busca que la Isla del Coco se respete como un lugar sagrado, que las personas que la visitan respeten sus aguas y que se genere una conexión espiritual con el fin de tener una convivencia armónica con la Isla.
¿Y por qué santuario de tiburones?
El biólogo marino y guardaparques de ese lugar, Geiner Golfin, menciona que las especies más comunes que viven en la isla del coco son el tiburón Martillo y el tiburón Tigre. De estos últimos no había avistamientos desde 1980 hasta el 2009. Hoy en día viven tranquilamente en las aguas de la isla y se cree que llegan a ese sitio a aparearse.
“Los tiburones son un indicador de buen estado de salud de los mares, y por otro lado representa una importancia económica; ya que en la industria de buceo los tiburones son de gran atractivo turístico. Sin embargo la pesca no sostenible e ilegal ha sido una amenaza constante para esta especie”, explica Golfin.
Una sede para la investigación
En la Isla del Coco constantemente se realizan investigaciones mediante el programa La vida oculta de los Tiburones. Su objetivo es estudiar el ecosistema marino y así ofrecer una protección mayor al parque.
Según Golfin, el Parque Nacional Isla del Coco es más grande que la parte continental del país, por eso hay que conservarlo y darle su valor.
“Existe la hipótesis que los tiburones Martillo y Tigre van a la isla del coco a parir; esto ha sido investigado mediante el programa La vida oculta de los tiburones.”
Con la declaratoria de santuario se pretende hacer que las personas conozcan más este parque nacional y además entiendan la importancia que tiene preservar los ecosistemas marinos.
Y no solo basta con cuidar estos espacios cuando estamos cerca porque todo está conectado. El mar inicia en el fregadero de nuestros hogares: lo que botamos ahí va a la alcantarillas, esto a su vez a los ríos, hasta llegar a los océanos. “Este país es verde pero recuerde también que es azul”.
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Les compartimos la entrevista completa que se le hizo al biólogo y guardaparques, Geiner Golfin en el programa Comunidad 870.