El documento fue entregado el pasado viernes al director del OIJ, Walter Espinoza, en una reunión en la que participó un representante del territorio indígena de China Kichá, de Pérez Zeledón, así como representantes de la Coordinadora de Lucha Sur-Sur y del Bloque Verde.
Al menos 12 organizaciones indígenas firmaron un documento para solicitar al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) crear un protocolo de atención especializado que respete la cosmovisión de los pueblos ancestrales y que brinde respuesta a las problemáticas de violencia en comunidades originarias.
El documento fue entregado el pasado viernes al director del OIJ, Walter Espinoza, en una reunión en la que participó un representante del territorio indígena de China Kichá, de Pérez Zeledón, así como representantes de la Coordinadora de Lucha Sur-Sur y del Bloque Verde.
En la carta, además, se le pide al OIJ realizar un informe donde se valore las actuaciones del organismo en al menos 22 causas judiciales y hechos ocurridos en los últimos meses en territorios indígenas.
La población originaria también exhortó a que las investigaciones se realicen de manera imparcial. Por último, en el documento se pide al OIJ establecer canales de comunicación más directa con la población indígena afectada por la violencia dentro de los territorios.
Edward Torres, indígena cabécar del territorio ubicado en el cantón de Pérez Zeledón, indicó luego de la reunión que en la actualidad dentro de su comunidad se vive un clima tenso.
“Hemos vivido violencia, racismo, discriminaciones, intentos de homicidio y nosotros queremos que las leyes sean cumplidas. Es triste ver a los compañeros golpeados. Queremos lo mejor para nuestro territorio”, expresó Torres.
“Allá hemos vivido muchos casos de quemas, nos han quemado los cultivos, las casas, que con tanto esfuerzo nos ha costado tener. No queremos más violencia. Queremos una tranquilidad para nosotros”, añadió.
Torre viajó a San José luego de que, el pasado 25 de febrero, 13 personas indígenas cabécar de China Kichá fueron heridas tras un ataque en una de las fincas recuperadas por la comunidad y que en la actualidad se mantiene en disputa.
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El representante de China Kichá señaló que no existe confianza en la actuación de las autoridades judiciales, ya que las denuncias que presentan los pobladores originarios por lo general no prosperan, según dijo.
“Nos dicen que no hay evidencia, no hay testigos y ahí archivan todo, pasan los días y nunca nos dan informe de lo que uno fue a demandar”, señaló Torres.
Por su parte, el representante de la Coordinadora de Lucha Sur-Sur, Gustavo Oreamuno, resaltó la importancia del compromiso alcanzado con el OIJ tras la reunión. Según Oreamuno, el protocolo de atención de pobladores indígenas ya estaría casi listo y faltaría que los representantes del OIJ solamente lo validen entre los habitantes de los 24 territorios indígenas del país.
Fabián Pacheco, del Bloque Verde, expresó preocupación ante el aumento de violencia en territorios indígenas producto de la organización de grupos cuyo fin es generar violencia en contra de la población originaria.
“Si no ponen un alto, esto es la antesala a grupos cada vez más paramilitares en nuestro país, agrediendo a los compañeros indígenas”, manifestó. Añadió que “si el OIJ no toma cartas en el asunto, esto va a decantar en que estas organizaciones se van a envalentonar cada vez más”.