El cuestionamiento del candidato presidencial por sus conductas contra mujeres pesa poco en el electorado, que cobra más a Figueres el antecedente de 2004 sobre el caso ICE-Alcatel.
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Un 45% de la población considera irrelevante para efectos electorales la denuncia que enfrentó en el Banco Mundial por acoso sexual el candidato presidencial Rodrigo Chaves, la cual derivó en sanciones por conductas sexuales inapropiadas y marcó la salida del economista de ese organismo multilateral en el año 2019.
“Nada” influye ese antecedente en la intención de voto que se perfila para la segunda vuelta presidencial programada para el 3 de abril, contestó el 45% de los entrevistados en la última encuesta CIEP-UCR, realizada entre el 22 y 24 de febrero.
Mientras tanto, el 22% dice que el tema incide “poco” y el 34% dice que sí afecta “mucho”, según el estudio de opinión.
De esta manera, parece salir bien librado de la condena popular el candidato Chaves, quien fungió seis meses como ministro de Hacienda del gobierno de Carlos Alvarado, sin que se sepa hasta ahora si había notificado o no sobre la denuncia que tuvo en el Banco Mundial.
El caso se conoció de manera pública cuando ya Chaves se había confirmado como candidato presidencial del Partido Progreso Social Democrático (PPSD), por publicaciones del diario La Nación y, posteriormente, también por The Wall Street Journal, que señaló que un tribunal posterior consideró que las sanciones dictadas a Chaves debieron ser mayores.
Las denuncias apuntaban a comentarios inapropiados y aparentes insinuaciones hacia mujeres jóvenes, supuestos actos que le valieron la fama de ser un “reconocido acosador”, de acuerdo con testimonios recogidos por los expedientes internos del caso.
Chaves, quien atribuye las denuncias a “chistes” suyos o a mala interpretación de su cultura latina, lleva seis meses defendiéndose en medios, justificando o minimizando el caso, o incluso atribuyendo las publicaciones a supuestas estrategias de “grupos poderosos”.
Pese a críticas y repudio de grupos feministas, de partidos adversarios y de otras voces que le reprochan su actitud ante las mujeres, nada le impidió ascender en medio de la abundancia de candidaturas y colocarse en segundo lugar el 6 de febrero, lo que le da paso a la segunda ronda, ante la cual aparece como favorito, según la encuesta CIEP-UCR.
Chaves se benefició del apoyo de su principal aliada, la periodista Pilar Cisneros, y la importancia que le dan hombres o mujeres al acoso sexual contra mujeres, aunque el 40% de los encuestados considera que la denuncia es cierta, frente a 13% que le resta total veracidad y 47% que tiene dudas.
Estas variables frente a otros rasgos que ha exhibido Chaves, aunque también ha recibido cuestionamientos por la opacidad de su financiamiento electoral, resultan en un saldo favorable de la imagen pública que, de momento, parece allanarle el camino a la Presidencia de la República.
