Residuos y más residuos por todas partes. Costa Rica produce cada vez más residuos y con ello aumenta el volumen de las emisiones de gases de efecto invernadero con las que contaminamos el planeta. ¿Qué se puede hacer desde casa? La clave está en el reciclaje y el compostaje.
En 1990, las personas viviendo en Costa Rica generaban 153 kilos de residuos al año. Esa cantidad casi se duplicó a finales de la década pasada, llegando a los 287 kilos por habitante.
Son tantos los residuos que se producen que, si se tuviera que cubrir el territorio nacional con ellos, en cada kilómetro cuadrado de Costa Rica cabrían 28 mil kilos de desechos. ¡Los residuos contabilizados suman más de 1.500 millones de kilos al año! Y de ello, si acaso, se recicla una décima parte.
Por estas razones, no extraña que el tratamiento inadecuado de los residuos, en Costa Rica produzcan el 15% de todos los gases de efecto invernadero (GEI) que emite Costa Rica y que causan el cambio climático. Nada más y nada menos que equivalentes a 2,1 millones de toneladas al año
Separar, reciclar, reutilizar, claves contra gases de efecto invernadero
En este mar de residuos en el que se habita, las personas somos clave para disminuir las emisiones de GEI del sector. Cada una de las acciones para separar, reciclar y reutilizar puede tener un gran impacto ambiental.
A ese impacto ambiental, también se le debe sumar la exigencia a los gobiernos locales para que realicen de forma eficiente su trabajo y garanticen que el servicio de recolección separada se de en cada rincón de la comunidad. Algo que, lamentablemente, no ocurre hoy en el país.
Por ejemplo, el siguiente gráfico muestra que, a pesar de que hay hogares donde se realiza una correcta separación de residuos en los hogares, la respuesta municipal no siempre es la ideal.
¡Los residuos orgánicos no van a la basura!
Según el Ministerio de Salud, el 52% de todos los residuos que se generan son materia orgánica, por lo que todo lo que se haga para que los restos orgánicos sean tratados en casa y no llegue a los rellenos sanitarios, es clave para reducir la producción de GEI que se genera al combinar residuos orgánicos con inorgánicos.
Y ahí, entra el compostaje como clave de la transformación. El compostaje es un proceso natural de descomposición de materiales orgánicos que, posteriormente, podremos incorporar como abono orgánico para facilitar la regeneración natural de los suelos y así, le se le da un valor agregado a un recurso que de otra manera, aportaría a la generación de GEI.
Antes de iniciar un proceso de compostaje, es fundamental hacer un uso eficiente de los alimentos y de productos orgánicos, es decir, hay que evitar al máximo el desperdicio, esto se logra al solo comprar y cocinar lo necesario.
Para el compostable se necesita: cáscaras de frutas, de vegetales y de huevos, restos de comida, servilletas, pasto seco picado, café molido seco, entre otros materiales orgánicos.
Y entonces, ¿qué pasa cuando ya se separó ese tipo de materiales del resto de los residuos? Hay distintas formas de generar compost y todo depende de las condiciones que se tenga.
La más común es la caja compostera. En caso de que se cuente con un patio o un espacio similar en casa, se puede optar por gestionar los residuos en un cajón, solo se necesita un lugar con sombra y seco.
En la siguiente infografía se resume el proceso:
Hay otros tipos de composteras, como las giratorias o las lombricomposteras, estas suelen necesitar de más espacio y recursos, sin embargo siguen siendo una buena opción. En la Guía para el Manejo de Residuos Orgánicos de la Universidad Nacional, se puede profundizar más sobre ellas.
También, existen iniciativas colectivas y comunales, como es el caso de Tortuguero, donde la comunidad cuenta con una compostera semi automatizada que recibe y trata los residuos orgánicos de la zona.
Además, vale la pena recalcar que, distintas municipalidades del país, han iniciado proyectos de compostaje comunal. Por ejemplo, la Municipalidad de Desamparados, desarrolló una página web en las que las personas podrán aprender de forma fácil y entretenida, cómo manejar sus residuos orgánicos desde casa, y así contribuir con la mitigación de los GEI.
En la página web de la Municipalidad de Desamparados, llamada Composteros, hay cursos en línea sobre compostaje y a la vez, se puede estar en contacto con otros composteros para intercambiar conocimientos y experiencias y ayudarse en el proceso de aprendizaje. Todo esto sin necesidad de ser parte del cantón de Desamparados.
¿Qué hacer con el resto de los residuos?
Una vez separados los residuos orgánicos para hacer compost, se procede separar los residuos valorizables, es decir: plástico, bolsas, vidrio, aluminio, papel y cartón.
En el caso de las botellas, es más sencillo y común reciclar aquellas que son tipo #1 (PET) y #2 (HDPE), esta identificación se puede encontrar en los empaques de las botellas. Es importante evitar la compra de botellas de plástico, pero en caso de que no haya otra opción, se debe comprar de este tipo para que puedan ser recicladas
En la siguiente infografía se muestra cuáles productos pueden reciclarse y cómo hacerlo.
Una vez realizada esta separación, se acude al centro de acopio más cercano y se entregan los productos. Según datos del Ministerio de Salud, al 15 de febrero de 2022, hay más 400 gestores de residuos autorizados y registrados en Costa Rica.
Además, según datos de este Ministerio, solo un 17.5% de los residuos no son valorizables. Por eso, si se recicla, poco a poco la bolsa de “basura” será cada vez más pequeña. Y si esto ocurre en la mayoría de los hogares, se evitará que lleguen más residuos al relleno sanitario, lo que disminuirá la emisión de GEI.