En resumen: El presidente Carlos Alvarado destacó en su discurso presidencial ante el Congreso que el país había tenido un superávit primario al mes de marzo por primera vez en 11 años. La afirmación es engañosa, aunque se atenga a números correctos.
El período que cerró en marzo del 2021 fue atípico, por lo que es engañoso compararlo con períodos anteriores sin el debido contexto. El mandatario repitió la afirmación descontextualizada en una entrevista publicada hoy por La Nación.
El presupuesto nacional más reciente incluyó por primera vez a los órganos desconcentrados del Estado, lo que sumó un balance positivo en ingresos. Además, fue un período excepcional porque incorporó los ingresos por impuesto sobre la renta correspondiente a 15 meses, a diferencia de los períodos de 12 meses anteriores.
El balance entre ingresos y gastos habría podido reflejar una cifra más cercana al punto de equilibrio o incluso al déficit sin estas anomalías.
¿Qué dijo Carlos Alvarado?
En su discurso en la Asamblea Legislativa el pasado 4 de mayo, el presidente Alvarado dijo:
“La Hacienda pública cerró el primer trimestre de este año con superávit primario, por primera vez en 11 años”.
El mandatario reafirmó en entrevista con La Nación que «es positivo que tengamos en el primer trimestre un superávit en la Hacienda Pública».
El país tuvo un superávit primario de 0,61% del PIB (producto interno bruto) en marzo del 2021, según números del Ministerio de Hacienda. Es cierto que las finanzas públicas no veían un superávit en este período interanual desde el 2009. Por 11 años se repitió el déficit.
Un superávit primario se da cuando los ingresos del Gobierno Central superan sus gastos corrientes. El cálculo no toma en cuenta los gastos por intereses de las deudas del Estado.
El presidente omitió dar un mayor contexto que habría aclarado que el indicador positivo coincide con modificaciones contables y con ingresos extraordinarios provocados por cambios en el calendario tributario.
Inclusión de órganos desconcentrados
El período interanual que cerró en marzo del 2021 es distinto a cualquier otro periodo anterior. ¿Por qué? A diferencia del mismo período para el 2020 y los anteriores, el presupuesto nacional por primera vez incluye 50 órganos desconcentrados del Estado. Ellos aportaron un balance positivo de ingresos al presupuesto.
El Fondo de Asignaciones Familiares (Fodesaf), por ejemplo, no se solía incluir en el plan financiero. Su incorporación significó adicionar un balance positivo de 0,26 puntos porcentuales del PIB en los ingresos.
Fodesaf es la institución que más aporta al nuevo modelo de confección del presupuesto. La inclusión de otros órganos representó un incremento de 0,06 puntos porcentuales del PIB. Este cambio llegó tras la aprobación de la ley de Fortalecimiento del Control Presupuestario de los Órganos Desconcentrados del Gobierno Central, que empezó a regir para el presupuesto del 2021.
Es decir, el superávit primario que corresponde a 0,61% del PIB le debe al menos 0,32 puntos porcentuales a un cambio contable ordenado por la nueva ley.
Renta por 15 meses
El mayor aporte al superávit reflejado por el Ministerio de Hacienda para marzo del 2021 viene del impuesto sobre la renta. Comparado con marzo del 2019, el fisco captó para el nuevo período ₡145.908 millones más por renta, lo que corresponde a unos 0,38 puntos porcentuales adicionales del PIB. El aporte total del impuesto fue de ₡625.150 millones (1,67% del PIB).
Los ingresos por renta crecieron alrededor de un 23%. ¿A qué se debió? Buena parte del salto se explica por el hecho de que este fue el primer y único período que cubrió 15 meses de contribuciones. Los períodos anteriores cubrían 12.
Uno de los cambios de la reforma fiscal fue modificar el calendario tributario para la renta, cuyo período abarcaba del 1.º de octubre al 30 de setiembre. La nueva regla haría coincidir el período con el año calendario, desde el 1.º de enero al 31 de diciembre.
El período pasado se generó el ajuste, por lo que cubrió desde el 1.º de octubre del 2019 hasta el 31 de diciembre del 2020 (15 meses). El cambio provocó que Hacienda recibiera los tributos por rentas generadas durante tres meses adicionales. Este es un incremento que no tuvo ningún período anterior y que no tendrá ninguno posterior.
El cambio tuvo un efecto en ese incremento de 0,38 puntos porcentuales del PIB en la recaudación por renta entre marzo del 2020 y marzo del 2021. Eso sí, Doble check no tiene datos suficientes para determinar cuál fue el efecto preciso del cambio de calendario fiscal.