Proteger nuestra salud y la de nuestra familia es esencial para atender la crisis provocada por los recientes cortes de agua en las comunidades. Por ello, aquí le presentamos algunas medidas que puede tomar dentro de su hogar para mantener la higiene mientras escasea el agua.
“Podríamos hacer pequeñas cosas que en el conjunto puedan favorecer que los cortes a la larga no sean tan severos”, dijo el doctor Sergio González.
Para empezar, se deben considerar acciones de prevención como tener alcohol en la casa. Esto para desinfectar manos y superficies. También tener siempre una ropa de cambio para mantener la higiene en una situación de emergencia.
Además, debería seleccionar los recipientes adecuados en los cuales se va a almacenar el agua para el corte. Idealmente dividir estos según el tipo de uso: para consumir, para lavar platos y comida o para limpiar el inodoro.
El agua que vamos a consumir tiene que estar en recipientes específicos como botellas de plástico o vidrio que tengan un cierre hermético. Otra opción es que esté en contenedores que ya hayan albergado este líquido antes y que se puedan cerrar. Lo importante es que se mantenga lo más limpia posible.
De igual forma, el agua para cocinar necesita estar en condiciones de aislamiento y limpieza, aunque podría estar en envases más prácticos de usar como ollas o picheles con tapa.
Para los servicios sanitarios el agua puede estar en cualquier recipiente, por ejemplo, una tina. Para los baños se puede utilizar el agua de lluvia, pero esta debe estar en estañones tapados y tener un uso planificado por el riesgo de acumulación de bacterias o de que se convierta en un foco de dengue.
“En un periodo de 2 o 3 días, utilícelo [el contenido del estañón], lo agota, y recámbielo”, indicó el doctor González de la Oficina de Bienestar y Salud de Universidad de Costa Rica durante una entrevista con Saber Vivir de la 870 UCR.
ALMACENAMIENTO DE AGUA
Antes del corte se debe guardar agua pero ¿desde cuánto tiempo antes puede estar almacenada?
Si el líquido fue refrigerado puede mantenerse hasta 15 días. Si está a temperatura ambiente debe tener recambios frecuentes, no más de 3 días.
Si está almacenada en estañones, lo ideal es un recambio rápido, utilizarla lo más pronto posible para tareas como riego de plantas o limpieza de superficies.
Durante el corte, ya sea que este haya sido avisado previamente o sea inesperado, es vital administrar según las prioridades.
Estamos en época lluviosa y con olas de enfermedades infecciosas, por lo que si hay una persona enferma en casa se debe prestar especial atención a la desinfección y seguir los protocolos de estornudos y limpieza que aprendimos en la pandemia.
Por otro lado, se debe considerar que cuando no hay agua hay actividades que no son prioridad en el momento. No lave el carro ni lave la acera durante el corte. Los principales puntos de atención deben ser el consumo, el lavado de alimentos y el agua para la limpieza de cisternas. Esto último es importante para que no crezcan bacterias que nos puedan enfermar. Se puede lavar el servicio con alrededor de 4 litros.
DESINFECCIÓN
Si tenemos duda del estado del líquido o queremos usar agua que no estaba tan limpia para los alimentos podemos hervirla para limpiarla.
“Si tenemos alguna duda mejor no la utilicemos para consumo o para lavado de alimentos que es lo más importante. Si no es una duda tan severa podemos hervirla, ya después la ponemos a temperatura ambiente y la podemos utilizar”, dijo el doctor de la OBS, Sergio González.
Si la duda prevalece, también se puede añadir unas gotas de cloro. En pocas cantidades no son dañinas para el consumo humano. La medida es de 4 a 6 gotas de cloro por galón de agua.
Cuando regrese el agua si sale blanca se recomienda dejarla correr hasta que vuelva a la normalidad. Si luego de unos minutos sigue con color, se puede poner a hervir para limpiarla.
Finalmente, recuerde que haya o no agua siempre podemos y debemos tomar medidas para cuidarla: procurar no dejar el tubo abierto al lavarse los dientes o mientras se enjabonan los trastes; aprovechar la lluvia para lavar el carro; evitar verter por el tubo compuestos químicos; vigilar por fugas en las fuentes de agua; y no usar más de la necesaria, como bañarse con el tubo a toda potencia.
Como dijo el doctor González, “somos los actores principales y nosotros podemos dar nuestro granito de arena ante lo que hagamos diariamente”.