Dar nos permite conocernos y reconocer a los demás. Por eso es que se habla de que hay magia detrás de esta acción.
Todo lo que hacemos está conectado. Cada vez que damos, recibimos y no necesariamente se habla de aspectos materiales o reconocimiento público, se trata de sentimientos y de satisfacción personal.
Alfredo Beltrán es parte del equipo coordinador de Brahma Kumaris en Argentina. Beltrán participó en el programa Café para el Alma para contar cómo el aprender a dar cambió su manera de ver la vida y la forma de interacción con las demás personas.
“En un momento en que sentía que necesitaba un cambio, entendí esta idea de que todo lo que estaba sucediendo era consecuencia de lo que yo estaba haciendo. Fue mágico para mí porque muy rápido pude ver cambios en mis relaciones y en mí mismo”, señala. Según Beltrán vale la pena dedicar tiempo y energía para observar atentamente a quienes tenemos alrededor, reconocer sus necesidades y tratar de ayudar.
“Dar depende de mí, y no necesariamente cosas físicas, es estar atento a qué hace falta, a dónde puedo aportar. Es la actitud de poder otorgar con mi propia presencia”- Alfredo Beltrán, Brahma Kumaris Argentina.
Ese compartir no necesariamente está ligado a objetos materiales. Beltrán explica que las cosas más valiosas que podemos obsequiar son sutiles y no necesariamente materiales. Una sonrisa, un saludo sincero o dar un rato de atención a una persona, puede hacer una gran diferencia.
“Dar nos conecta con un sentimiento de propósito, con un poquito podemos hacer mucho por otros”, enfatiza.
APRENDER A DARNOS
Para aprender a dar hay que tratar de lograr ese equilibrio entre el cuidado a mi mismo y a los demás. “Lo importante es atender a nuestro ser y luego a los demás. Preocuparme por los demás no es dar, yo no puedo dar algo valioso cuando estoy ocupándome de mí”, indica Beltrán.
Aquí es donde entra el tema de la importancia del autocuidado. Este término tiene que ver con la búsqueda activa de nuestro bienestar tanto físico como psicológico o emocional.
“El autocuidado es fundamental para poder dar algo de calidad, dar sin esperar algo a cambio”- Alfredo Beltrán, Brahma Kumaris Argentina.
Un gesto de autocuidado puede ser llevar una alimentación equilibrada o dormir lo suficiente pero también existen otros que influyen en el bienestar emocional como el lenguaje interno que tenemos hacia nosotros mismos, priorizar nuestras necesidades o ser autocompasivos, entre otros.
Según Beltrán su rutina de autocuidado inicia con el conocimiento. A partir de esa información que recibe, toma decisiones en donde conecta con su realidad interna. Este aspecto y la meditación le permiten estar cerca de su ser y recargarse de energía espiritual.
“Es como reconocernos o ser livianos con nosotros también, usar todo esto con nosotros mismos, generar autocompasión y autocuidado. Desde ese estado el dar es puro, sale del corazón”, dice Beltrán.
Conozca más sobre la experiencia de Alfredo Beltrán en este programa de Café para el Alma.
