Proyecto del AyA captaría el caudal del río La Fuente y amenaza con cerrar el balneario de Ojo de Agua, afectando a las comunidades de Belén y San Rafael de Alajuela, tanto en sus ecosistemas naturales como en actividades agrícolas.
Un movimiento comunitario de autoridades locales, personas agricultoras y sus organizaciones, dirigencia comunal, ecologistas, mujeres y personas jóvenes de las comunidades de Belén de Heredia y San Rafael de Alajuela se han unido bajo el nombre de “La defensa de Ojo de Agua y el Río la Fuente”, para defender los ecosistemas de las fuentes de aguas, su caudal hídrico y el valor histórico-cultural del balneario Ojo de Agua.
En 2012, las comunidades se enteran de un proyecto de Acueductos y Alcantarillados (AYA), que consiste en captar el caudal del manantial de Ojo de Agua, en una primera etapa parcialmente y en una segunda etapa en su totalidad. Esto claramente representa un enorme impacto sobre el río La Fuente, que es uno de los pocos ríos limpios que quedan en el Gran Área Metropolitana.
Según trascendió en la prensa, este proyecto busca solventar problemas de desabastecimiento de agua en poblados de Hatillo y otros barrios del sur de San José. Además de la alta demanda de agua potable que ha generado la expansión inmobiliaria en la capital.
Ante este panorama, las comunidades y las autoridades municipales de Belén y San Rafael de Alajuela, solicitaron a las municipalidades y al MINAE información para poder iniciar un proceso de estudio y balance socioambiental comunitario de las propuestas. En la respuesta institucional se confirma la intención de captar el caudal mencionado.
Uno de los focos de preocupación ciudadana, fue que el AYA se negara a realizar los estudios de impacto ambiental necesarios, amparados en un decreto de emergencia nacional. El presidente de la institución durante la administración anterior, ofreció disculpas públicas a las municipalidades involucradas por el secretismo y anunció dar marcha atrás a la intención de acoger el decreto y aseguró que sí realizarán los estudios de viabilidad ambiental.
Las alarmas alrededor de este proyecto
- Impacto sobre los ecosistemas, catalogado por la Municipalidad de San Rafael de Alajuela como “consecuencias catastróficas” de carácter ambiental.
- Impacto en la agricultura que depende directamente de este caudal.
- Los vecinos lo catalogan como un cierre técnico del balneario de Ojo de Agua.
Según una moción del Consejo Municipal de Belén, el manantial de Ojo de Agua existe probablemente desde hace miles de años, es un afloramiento natural del acuífero Barva, que nos da agua potable a casi un 60% de la Gran Área Metropolitana.
Uno de los impulsores del movimiento es Ulises Araya, Regidor de la Municipalidad de Belén, explicó, durante una entrevista en el programa Voces y Política de Radio Universidad:
“El manatial del Ojo de Agua produce 361.3 litros por segundo y en este momento las concesiones que ya hay para consumo humano son de 218.2 litros por segundo, es decir, al caudal del río la fuente le quedan 143 litros por segundo, y hay que sumarle que de esos hay 24 litros por segundo están también concesionados para agricultura”.
La lucha que llevan a cabo los grupos ciudadanos mencionados, son también apoyados por Marvin Venegas, Síndico de la Municipalidad de San Rafael de Alajuela, quien explica que este balneario es un símbolo para la comunidad y un patrimonio que hoy tiene a las personas unidas para protegerlo.
“Nunca nos vamos a oponer a satisfacer las necesidades de agua potable de las poblaciones del Sur de San José, pero creemos que hay otras formas de solucionar el problema, que no sea sacrificando el río La Fuente”, afirma Venegas.
Por su parte, Nina Garrigues, miembro del Comité Pro Defensa del Ojo de Agua y activa dentro de los grupos de defensa del río La Fuente, aduce:
“Hay cabos sueltos, a simple vista podemos ver que no es viable un proyecto así, y preocupa la falta de estudios y mediciones adecuadas”.
Gracias a la marcha patriótica y pacífica que se dio en el 2021, se logró frenar el inicio de las construcciones, que estaban planeadas para diciembre del año pasado. Actualmente, el grupo continúa exigiendo la justificación técnica adecuada para implementar este proyecto y solicitando apoyo social para aumentar la presión sobre las autoridades.
Impacto ecológico, social e histórico
El balneario de Ojo de Agua fue, antes de 1920, un complejo informal de aguas de manantial conocido por los vecinos del cantón como “La Fuente”, que destaca como atractivo turístico del cantón e incluso los vecinos las catalogan como “aguas milagrosas” pues no tienen cloro ni ningún químico adicionado. Esto se traduce en un impacto directo e indirecto en la economía local.
El río La Fuente recibe su principal caudal de este manantial Ojo de Agua, pasa por las piscinas, de ahí al lago y luego al citado río. Este río alberga importantes ecosistemas porque su caudal se mantiene considerablemente limpio, inclusive ha sido galardonado con la Bandera Azul.
