Las mujeres de la región de Talamanca han dicho “suficiente” al tomar en sus manos la lucha contra la violencia que se ha manifestado en múltiples ámbitos de su vida. La Agenda Común de Mujeres Talamanqueñas ha sido un documento concebido para tomar acciones con el fin de prevenir y atender la actual problemática de violencia sexual en la comunidad de esta parte del país.
La iniciativa ha sido impulsada por más de 40 mujeres talamanqueñas de 18 organizaciones que comprenden estas formas de violencia, no sólo como cuestión que las afecta simplemente por su identidad como mujeres, sino que le dan una especial atención a la interseccionalidad que atraviesa esta situación.
La agenda prioriza integrar a mujeres con diversos contextos, necesidades, grupos etarios, trasfondos culturales y demás que precisamente caracterizan al colectivo que la ha escrito.
EL DETONANTE QUE EMPUJA LA CREACIÓN DE LA AGENDA COMÚN
La realización de esta agenda tiene sus antecedentes en casos de violencia que han paralizado a la población como es el caso de feminicidios, violaciones, embarazos infantiles y adolescentes, relaciones impropias y demás relacionados.
Pero, no son solo estas evidencias de violencia las que mueven este proyecto, pues parte de lo que también aqueja a la población femenina de Talamanca toma forma en microagresiones y acciones sexistas que se esconden en su cotidianidad.
Laura Wilson y Thalía Jiménez, lideresas afrodescendiente y ngöbe respectivamente, las ejemplifican al hablar del menosprecio que las mujeres perciben en espacios políticos y de toma de decisiones. En estos sitios se les percibe como las que constantemente están en desacuerdo, incapaces de decidir (o si lo hacen no son tomadas en cuenta) y hasta han advertido de su inclusión en estos espacios importantes por mero requisito o de manera estratégica pues cuentan con cierta influencia hacia otras mujeres.
“Nosotras debemos también ser protagonistas, de que nuestras voces se escuchen, de que no solamente cuando se necesita una cantidad x (de personas) se nos tome en cuenta…” -Laura Wilson, lideresa afrodescendiente
Estas se han acumulado a lo largo del tiempo construyendo un ambiente tenso en la región del sur, mas no es hasta los sucesos de violaciones durante el 2022 lo que ‘derrama el vaso’ para este grupo de mujeres.
Estos aspectos las empuja a alzar su voz y a organizarse de manera que comienzan a diseñar este plan de acción acogido principalmente por instituciones como Naciones Unidas (a través del UNFPA y el PNUD) la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), La Oficina de Género de la Municipalidad (OFIM) y la Fundación Friedrich-Ebert-Stiftung (FES).
5 EJES PARA LA MULTICAUSALIDAD DEL PROBLEMA
La Agenda Común tiene muchos ángulos desde los cuales necesitan solventar la violencia hacia mujeres, es por esto que el documento aborda estos a través de sus 5 ejes: violencia contra la mujer, salud, empoderamiento económico, educación y cultura.
En la conversación con Laura y Thalía que eligen estos puntos pues existe un consenso sobre la existencia de aquellos espacios cuyas dinámicas carecen de una adaptación de acuerdo a la población de Talamanca, recordando que son mujeres con identidades convergentes las que experimentan la mayoría necesidades ante esto.
Además de lo discutido en torno a violaciones a su bienestar y resistencia a su inserción así como presencia política, también existen situaciones en donde se les obstaculiza hacer trámites financieros por ser mujeres, donde se les impide a sus hijos hablar idiomas originarios de pueblos indígenas o hasta la manera en que los procedimientos y tratos médicos no calzan con las necesidades culturales a la hora de recibir estos servicios.
Son momentos de indiferencia y descuidos crónicos que contribuyen a las agresiones por las que estas mujeres se levantan.
¿QUÉ SIGUE PARA ESTA INICIATIVA?
Con la publicación del documento oficial y completo de la Agenda Común, lo más importante para este colectivo autor es su divulgación y conocimiento especialmente entre mujeres de la zona. Son las que más necesitan saber que en esas hojas pueden ver su situación reflejada y que existe una herramienta con oportunidades. Es un proceso que esperan que dure aproximadamente 6 meses por lo que buscan conformar una comisión que le continúe dando seguimiento durante este período hasta que culminen con el proyecto.
“Por las que estamos, en memoria de nuestras ancestras y vamos adelante en el camino para nuestras nietas y los que vienen, pero todas unidas y juntas.”-Laura Wilson, lideresa afrodescendiente
Tanto Jiménez como Wilson mencionan que ya asumieron el mayor reto que es seguir adelante con la Agenda juntas y comunicarla desde un lugar tan remoto del país como lo es Talamanca. En el proceso han tenido la rica experiencia de ver un interés importante de mujeres de todas las edades involucrarse en esta incidencia, estar ‘codo a codo’ las unas con las otras mientras se ven como ejemplo y motor que las empuja a seguir luchando por este bien mayor por las pasadas generaciones y para las futuras.
Escuche más sobre el tema en este programa de Comunidad 870.