La flor de Itabo tiene muchos usos en Costa Rica: para cercar fincas, de forma ornamental y como ingrediente para platillos tradicionales. Conozcamos un poco más sobre esta flor.
Diariamente consumimos granos, semillas, hojas y frutos pero ¿cuántos de ustedes consumen flores? Con esto tal vez se le venga a la mente un alimento que ha sido tradicional, sobre todo en la época de marzo y abril: la Flor de Itabo.
A través del tiempo han sido varias la flores que han formado parte de la tradición culinaria costarricense, entre ellas las flores de ayote, madero negro o las flores de poró, pero la flor de itabo ha sido una de las más conocidas desde épocas antiguas.
El nombre científico de la flor de itabo es Yucca guatemalensis y pertenece a la familia de las agaváceas. La razón por la que es tan popular es porque tradicionalmente se ha utilizado en la construcción de cercas para la delimitación de terrenos y en lugares con riesgo a derrumbes, porque sus raíces le dan estabilidad a la tierra.
En su época de floración, de marzo a junio, no solo embellece las orillas de caminos y cafetales sino que también llena nuestras mesas de color, sabor y nutrición.
Según la investigadora de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica, Patricia Sedó, existen registros de platillos a base de esta flor en Guanacaste y en el Valle Central. Las formas de preparación de los guisos no varían mucho entre las zonas, donde prevalece el huevo o la papa como ingredientes principales.
Al estar en cercas y caminos y tan al alcance de las personas no es común que se comercialice actualmente en las zonas rurales del país, sin embargo las personas del Gran Área Metropolitana la buscan en las ferias y mercados con el fin de cocinarla y rescatar platillos tradicionales.
Jorge Cordero, agricultor de Cartago cuenta que detrás de la flor de itabo que llega a una feria o un mercado hay una gran cantidad de trabajo que tiene que ver con el proceso de extracción, preparación, selección y transporte.
En cuanto a propiedades nutricionales, Sedó explica que la flor de itabo se puede catalogar como un superalimento, ya que es una rica fuente de fibra; contiene pequeñas cantidades de ciertos minerales y vitaminas, entre los que sobresalen la vitamina C, calcio, magnesio y fósforo.
Las preparaciones a base de flor de Itabo son variadas. Algunas personas la cocinan con huevo y otras, la incluyen en sus postres y la convierten en una cajeta acompañada con leche y canela. ¿Qué receta prepara usted? Aquí le compartimos una.
Sin duda las propiedades de la flor de Itabo van más allá de su carácter ornamental. Es por eso que cada vez que busque un superalimento para incluir en su mesa, recuerde que la flor de itabo es una opción tradicional, económica y accesible.