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En resumen: El magistrado de la Sala Constitucional, Fernando Cruz, adujo ayer que pertenecía a la clase media mientras cuestionaba algunas de las reformas del proyecto de fortalecimiento de las finanzas públicas (expediente 20.580) a los esquemas salariales en el Poder Judicial.
“¡Cierto que sí, que el país está por quebrarse! ¿Y por qué no aumentamos el impuesto directo a las personas jurídicas un 3%, si es tanto el problema? ¿Y la pobreza? ¿O es que nosotros –clase media– vamos a resolver la pobreza del país?”
Aunque la clase social está definida por muchos más factores que el salario, la afirmación del magistrado es falsa. Cruz, con un salario líquido de ₡6.297.524 forma parte del 1% de los costarricenses con ingresos netos por trabajo más altos del país (aquellos superiores a los ₡2,5 millones).
Más allá del chequeo básico sobre el salario del magistrado, este tema nos permite cuestionar más de una burbuja en redes sociales de personas que creen ser de clase media o clase media baja, cuando en realidad pertenecen a otros grupos económicos.
¿Qué dijo Cruz?
La exposición de Cruz de ayer, martes, incluye más de una declaración polémica. Cruz adujo que la propuesta fiscal incidía en el funcionamiento del Poder Judicial (puede ver la participación a partir del minuto 1:57:00) y que ese impacto carecía de un criterio técnico. Para el magistrado, la reforma habría reducido el control de los salarios, afectado los mecanismo de evaluación de jueces y, con ello, la independencia de ese poder.
“Es ahora que viene aquí, que la pobreza se convierte en una prioridad. No fue antes, y ahora el Poder Judicial tiene que resolver la pobreza. Bueno, tal vez sea otra función que nos puedan dar”, dijo con sarcasmo.
Cruz anunció que renunciaría al rubro gerencial por el que recibe 1,4 millones por mes, para demostrar que no defendía sus privilegios. Así, su salario pasaría de 6,3 millones a 4,9 millones.
“Yo no fui electo Presidente de este Poder para hacer la ola. Para decir: sí, con mucho gusto (…). La premura y la precipitación son malas consejeras (…). Era otra época en la que los políticos hablaban de salarios crecientes, ¡otra época!”
En ese contexto, Cruz agregó la afirmación en la que se incluye en la clase media.
¿Por qué hablamos de clases de ingreso y no de clases sociales?
Para este chequeo contamos con la ayuda de Andrés Fernández Arauz: economista y estadístico, y habitual investigador del Programa del Estado de la Nación.
Aunque es muy común hablar de clases sociales y niveles de ingreso como una misma cosa, son temas diferentes. Las clases sociales incluyen el tipo de trabajo de la persona, el tamaño de la empresa en la que laboran, el sector económico al que pertenece esa actividad, el nivel educativo, entre otros.
Para este chequeo vamos a hablar de “clases de ingreso”. Ya Leonardo Garnier y otros economistas han empleado los deciles de ingreso del hogar (que incluye todos los ingresos del hogar), pero nosotros vamos a usar el ingreso por trabajo del individuo, en específico, el ingreso por trabajo neto total.
Emplearemos los datos de la Encuesta Nacional de Hogares de 2017 que reporta 1.985.734 trabajadores con ingresos por trabajo mayores a cero colones y más de cero horas trabajadas por semana. Para el trabajo, dividimos esas dos millones de personas en 100 grupos del mismo tamaño, y los ordenamos por su ingreso mensual, de mayor a menor. Pueden ver los cálculos completos aquí.
Lejos (muy lejos) de la clase media
Así, el primer percentil son las 19.841 personas que ganan entre ₡1.000 y ₡10.000 por mes. En el otro extremo, el último percentil están las personas que ganan salarios líquidos mayores a ₡2.500.000 colones por mes.
Cruz, con un salario líquido, con rebajas, de ₡6.297.524 pertenece al percentil número 100, es decir al “top 1%” con mayores salarios netos. Aún con su recorte anunciado, su salario líquido sería de ₡4.893.509: es decir, Cruz continuaría perteneciendo a ese grupo.
La encuesta del INEC nos permite ver otros datos sobre la distribución de salarios en el sector público. Por ejemplo, mientras que el 60% de los trabajadores del sector público se ubican por encima del percentil 80 (el 20% más rico del país, con ingresos salariales líquidos mayores a los ₡583.960), solo el 15% de los trabajadores del sector privado reciben esos ingresos.
A partir de los datos del INEC de salarios, si usted recibe un salario neto mayor a los ₡583.960… debería dejar de pretender que pertenece a la clase media.
¿Qué (creemos que) quiere decir Fernando Cruz cuando habla de clases?
En una entrevista con el periodista Henry Rodríguez, de Radio Columbia, el magistrado Cruz aseveró esta mañana que había cometido un error al integrarse dentro del grupo de la clase media.
“Me expresé mal. No estoy diciendo que yo pertenezca o no a la clase media. Lo que es evidente es que el 90% de los funcionarios judiciales que reciben un salario son de sectores medios. (…) Yo no puedo decir que soy de clase media, pero el 80%-90% de los funcionarios sí son clase media”.
Eso nos da pie para otro chequeo. ¿Es correcto que el 90% de los empleados del Poder Judicial pertenecen a la clase media? Ya estamos esperando los datos de todos los salarios del Poder Judicial, para poder verificar la afirmación del magistrado (los pedimos esta mañana al Poder Judicial).
“Es la primera vez que yo me percato, viendo todo lo que se ha investigado sobre la Dinastía de los Conquistadores, sobre quienes pertenecen a la clase gobernante, que resulte que los funcionarios judiciales sean de la clase alta, o con mayores ingresos en el país. A eso me refería”, agregó.
Cruz hace referencia a un libro de 1975 publicado por Samuel Stone, que arma los árboles genealógicos de las familias más ricas e influyentes del país, y demuestra que buena parte de los congresistas, comerciantes y gobernantes descendían de los primeros conquistadores españoles.
Para Cruz, las personas que forman parte del Poder Judicial no pertenecen a esos linajes. A partir de su declaración queda implícito que su definición de clase también está marcada por el linaje.
Acerca de Doble Check
Doble Check es un proyecto de auditoría del discurso público financiado por la Oficina de Divulgación e Información (ODI) de la Universidad de Costa Rica. Nuestro oficio nace de las fake news, o paparruchas, en buen castellano. También le tomamos el pulso a afirmaciones falsas, engañosas o medias verdades en el discurso político y en las publicaciones en medios de comunicación.
Si desea enviarnos sugerencias para chequear o verificar alguna información puede enviarnos un mensaje directo a cualquiera de nuestras redes sociales, o escribirnos a doblecheckcr@gmail.com. También puede seguirnos en Twitter e Instagram.
Nota del redactor:
A las 19:42 del miércoles 17 de octubre se corrigió un error en el texto, pues este indicaba: “Cruz, con un salario líquido, sin rebajas, de ₡6.297.524 pertenece al percentil número 100 (…)”, cuando debía indicar: “Cruz, con un salario líquido, con rebajas, de ₡6.297.524 pertenece al percentil número 100 (…)”.
Aunque todo el artículo hace mención a salarios líquidos, o salarios netos, lamentamos la confusión que pudo causar dicho error.