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En resumen: Desde el 1 de octubre, en redes sociales se ha difundido que la Asamblea Legislativa rechazó una moción para que las piñeras “tributen”, pero que se obliga a los agricultores “a pagar más” con el proyecto de reforma fiscal.
Solo esta imagen fue compartida casi 800 veces en Facebook, desde la página ‘Mae tenga paz’
Lo cierto es que la venta de cualquier producto al exterior (incluida la piña) se mantendría con 0% de impuestos (como hoy en día). Por otra parte, aquellos productores agropecuarios de canasta básica que hasta hoy venden con un 0% de impuestos deberían pagar 1% después de la reforma.
Eso sí, es falso que los diputados hayan presentado mociones para eximir de impuestos a las productoras de piña, o que el proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas proponga legislación específica para ese sector.
La piña sí debería pagar ese 1% del Impuesto al Valor Agregado (IVA) si se vendiera en el país como producto de la canasta básica.
¿Hubo mociones a favor de las piñeras?
No. El proyecto #NoComaCuento, de La Nación, nos ganó la vuelta y ya desmintió que se hubieran presentado mociones legislativas relacionadas con la producción y venta de piña en el proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
El texto del proyecto tampoco incluyó legislación puntual para las empresas piñeras en ninguna de sus versiones.
¿Entonces? ¿Cómo es que estaría exenta la piña?
En términos de carga impositiva, el proyecto mantiene el statu quo para las exportaciones. El proyecto de reforma fiscal pretende cambiar el actual Impuesto General de Ventas (IGV) por el Impuesto de Valor Agregado (IVA), que permite no solo tasar la venta de un producto final, sino rastrear y tasar toda la cadena de producción que requirió este producto.
Las exportaciones de bienes ya están exentas del IGV, y así mismo quedarán con el IVA.
“Igualmente, estarán exentos la compra de bienes y la prestación de los servicios que sean destinados a ser utilizados para la producción de bienes y servicios destinados a la exportación”, artículo 8 del proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas
La lógica de esa exoneración es “el principio de que los impuestos al consumo se pagan en el país en donde se consumen”, dijo la directora general de Hacienda, Priscilla Piedra.
La piña es el tercer producto de exportación más importante de Costa Rica: 9% del valor de las exportaciones nacionales provienen de esa fruta, solo superada por el banano y los dispositivos médicos, según las estadísticas de la Promotora del Comercio Exterior de Costa Rica (Procomer) para el 2017.
Entonces: sí, la piña estaría exenta del IVA pero no por ser piña, sino por ser un bien de exportación.
¿Y si la piñera vende en el mercado interno?
La piña es una fruta incluida dentro de la Canasta Básica Alimentaria, un conjunto de productos de consumo nacional que hoy está exento del IGV.
La reforma fiscal propone que esos productos pasen a pagar una tarifa diferenciada del 1% de IVA. Por eso, si el proyecto entra en vigencia y la piña se mantuviera dentro de la canasta básica, esta pagaría un 1% de IVA si es vendida en el mercado interno, y en caso de excluirse, su venta interna tendría la tarifa básica de 13%.
¿Hay más impuestos para el sector agropecuario?
Sí, para los productores agropecuarios de bienes incluidos en la Canasta Básica Alimentaria, que pasarían de 0% de impuesto de ventas a tener 1% de IVA.
Lo mismo pasaría con los insumos agropecuarios y de pesca no deportiva: el proyecto de reforma fiscal propone la tarifa diferenciada de 1% de IVA para esos productos, que están exentos actualmente, así como para los productos veterinarios. Así lo señala el artículo 11 de la reforma.
La venta de productos agropecuarios o agroindustriales orgánicos también ha estado exenta del Impuesto General de Ventas desde el 2006. A diferencia de las exportaciones, dicha exoneración no se mantiene en la propuesta del IVA.
El pasado 1 de octubre, el diputado José María Villalta, del Frente Amplio, presentó la moción de reiteración 9 para continuar la exoneración a ventas de productos orgánicos en el IVA, pero fue rechazada en el Plenario.
Por lo tanto, comparado con la situación actual, es correcto afirmar que hay más impuestos para el sector agropecuario que produce para el mercado interno en la nueva reforma fiscal.