La restricción vehicular diurna por terminación de placas pares e impares en todo el país se mantendrá hasta el 6 de junio. Así lo anunció este viernes el Ministro de Salud, Daniel Salas.
Además, supermercados, minisuper, pulperías y licoreras deberán cerrar a las 9 p. m. del 31 de mayo al 6 de junio. El jerarca de Salud justificó esa medida en reportes de Fuerza Pública sobre la dificultad de controlar aglomeraciones frente a esos comercios.
La circulación general de vehículos seguirá limitada de 5 a. m. a 9 p. m. en todo el territorio nacional.
Salud también extenderá hasta el 6 de junio los límites de aforo que definió para distintos espacios desde mayo, como el máximo de 25% de aforo en bares, el 75% de capacidad en hoteles de más de 100 habitaciones, y el cierre de playas a las 6 p. m.
Daniel Salas anunció que este viernes se identificaron 2.180 casos nuevos de COVID-19 y 33 fallecimientos vinculados a esa enfermedad.
Más camas para tratar COVID-19
La ocupación de centros hospitalarios por COVID-19 sigue en aumento. Esa fue la advertencia dada este viernes por el gerente médico de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), Mario Ruiz.
El gerente médico de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) destacó que, al jueves, la institución atiende a 1.404 pacientes por COVID-19. De ese total, 520 personas están en unidades de cuidados intensivos.
Ruiz destacó que la CCSS está ocupando 70% de todas las camas de cuidados intensivos para pacientes de COVID-19, y aclaró que eso está limitando las posibilidades de atención intensiva para personas con otras condiciones.
El gerente médico de la Caja agregó que 27 establecimientos de esa entidad en el país apoyan con horarios ampliados a 11 hospitales que tienen alta demanda por COVID-19. En esos centros médicos, se dirigirán casos de otras patologías que lleguen a los hospitales, y la institución prevé habilitar 140 camas para dicho propósito.
Plan para uso de hospitales privados
Este viernes, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) aprobó un plan de inversión para el uso de hospitales privados para patologías distintas a COVID-19, con el fin de aliviar la demanda en los centros de la Caja.
El presidente ejecutivo de la CNE, Alexander Solís, afirmó que el plan contempla destinar hasta ₡2.399 millones para indemnizar el uso de los hospitales Clínica Bíblica, CIMA, Metropolitano y La Católica.
Según Solís, la Caja utilizará esos espacios para atender a pacientes de baja complejidad que requieren estancias entre 3 a 5 días.
La CNE también aprobó destinar recursos para contratar a 150 médicos adicionales para el seguimiento remoto de personas enfermas de COVID-19 que están aisladas en sus hogares pero que no necesitan atención hospitalaria.
