“Para que no la tengamos [una nueva ola de casos de COVID-19], vamos a tener que hacer muchas cosas: primero, aprovechar estos cuatro meses, hasta el principio de junio, para vacunar a la mayor cantidad de gente”, dijo este miércoles en Interferencia Juan José Romero, coordinador del posgrado de Epidemiología de la Universidad Nacional (UNA).
El epidemiólogo señaló que las autoridades sanitarias de Costa Rica también deben reforzar la conciencia de respeto a las medidas de distanciamiento social y de uso de mascarillas para mantener la reducción de casos y muertes de COVID-19 en el país, que se ha registrado de manera sostenida desde mediados de enero.
Según datos recopilados por el Observatorio del Desarrollo de la UCR, en Costa Rica se identificaron 7.023 casos de COVID-19 del 2 al 8 de enero. Desde entonces, esa cantidad ha disminuido, hasta llegar a 2.749 casos del 6 al 12 de febrero. Un registro así de bajo no se registraba en el país desde julio del año pasado.
El Observatorio también resaltó recientemente que, del 1 al 5 de febrero, se acumularon un total de 45 decesos en el país, mientras que hubo 38 muertes vinculadas a COVID-19 del 6 al 12 de febrero.
Romero comentó que una razón de esa reducción puede ser la cantidad de personas que ya han desarrollado algún nivel de inmunidad contra el virus en distritos densamente poblados de la Gran Área Metropolitana (GAM).
“No es lo mismo que el virus llegue a un lugar ‘virgen’ que cuando llega y se encuentra que 1 de cada 3 personas tienen cierta inmunidad. Eso reduce la probabilidad de contagio y la velocidad de contagio”, afirmó el epidemiólogo, quien añadió que aún es demasiado temprano para ver los resultados de las primeras vacunaciones en las tendencias nacionales.
“Si sumamos que la gente está aprendiendo a usar mejor la mascarilla y lavarse las manos, y que se tienen ciertos protocolos en el trabajo, esto también puede producir una reducción de casos”, agregó el experto.
Aun así, Romero advirtió que el gobierno debe tratar “con cuidado” el mensaje que envía a la población con la reducción de restricciones con base en esa tendencia a la baja en los casos y muertes de COVID-19. “La gente podría decir ‘esta carajada ya está pasando’, o ‘es que apenas se están muriendo cuatro’, señaló el experto.
“El hecho de que se reduzcan los casos, de que disminuyan las muertes, el hecho de que haya una liberación de ciertas medidas para propiciar una reactivación económica, implica mayor responsabilidad por cada uno de nosotros porque, ante mayores libertades, tenemos mayores riesgos”, añadió Romero.
Puede ver la entrevista completa al epidemiólogo Juan José Romero aquí:
